Embárcate en una aventura mágica a Myanmar, donde las antiguas pagodas doradas y los paisajes misteriosos te invitan a descubrir un mundo lleno de cultura, historia y espiritualidad inigualables. Vive la esencia de Asia en su forma más pura.
Myanmar es un tesoro de maravillas naturales y culturales. Comienza en la imponente Bagan, un vasto campo de templos antiguos que se extienden hasta el horizonte, ofreciendo vistas panorámicas que parecen salidas de un sueño.
No te pierdas la majestuosa Shwedagon Pagoda en Yangón, un ícono dorado que resplandece al sol y es el corazón espiritual del país. En Mandalay, el Monasterio de Mahagandayon y el Puente U Bein, el puente de teca más largo del mundo, destacan por su belleza y relevancia histórica.
Visita el lago Inle, conocido por sus singulares pescadores que reman con una pierna y sus pintorescos pueblos flotantes. Cada rincón de Myanmar narra historias ancestrales y te transportará a épocas pasadas.
Sumérgete en la cultura de Myanmar con una travesía en globo aerostático sobre Bagan, admirando la inmensidad de sus templos desde las alturas.
Explora los vibrantes mercados locales y degusta la auténtica gastronomía birmanesa, rica en sabores exóticos y especias. Navega por el lago Inle en una barca tradicional, interactúa con las comunidades locales y descubre su forma de vida única.
Aventura en una excursión por las colinas de Shan, con paisajes impresionantes y senderos que te llevarán a conocer aldeas escondidas y sus tradiciones. Además, un recorrido por las pagodas de Mandalay te brindará una visión fascinante del arte y la arquitectura budista. Cada actividad te permitirá conectar profundamente con la esencia de este enigmático país.
En Myanmar, cada bocado es una invitación a explorar una cultura rica y diversa. Déjate seducir por la sinfonía de sabores que define la cocina birmanesa. Comienza tu aventura con el mohinga, el plato nacional, una exquisita sopa de fideos con pescado que ofrece una explosión de sabores gracias a su mezcla de hierbas frescas y especias. Los laphet thoke son una verdadera delicia: una ensalada de hojas de té fermentadas que combina texturas crujientes y sabores audaces con frutos secos, frijoles y verduras
No te pierdas el shwe yin aye, un postre refrescante a base de gelatina de coco y frutas tropicales, perfecto para cerrar con broche de oro tu experiencia culinaria. Y si buscas algo un poco más aventurero, prueba el ngapi, una pasta fermentada que, aunque intensa en sabor, es esencial para experimentar la autenticidad de la cocina local.
Cada plato en Myanmar no solo satisface el paladar, sino que también cuenta una historia de tradición y hospitalidad. ¡Ven y déjate llevar por una experiencia gastronómica que te hará enamorarte aún más de este fascinante destino!